2019
La Comisión Europea publicó el pasado mes de junio la comunicación “Directrices sobre la presentación de informes no financieros: Suplemento sobre la información relacionada con el clima”. Este documento está enmarcado en el Plan de Acción para Financiar el Crecimiento Sostenible del ejecutivo comunitario y pretende complementar las Directrices sobre la presentación de informes no financieros publicados en junio de 2017.
Por lo tanto, las recomendaciones están destinadas a empresas incluidas en el ámbito de aplicación de la Ley 11/2018 de Información no Financiera y, contra lo que pueda parecer, no pretenden fomentar la elaboración de informes independientes relativos a cuestiones sobre el clima, sino integrarlos junto con otra información no financiera.
El Plan de Acción para Financiar el Crecimiento Sostenible
El Plan de Acción para Financiar el Crecimiento Sostenible se publicó en marzo de 2018 con el objetivo de reorientar el capital hacia la inversión sostenible, gestionar los riesgos financieros derivados del cambio climático y otros problemas medioambientales y sociales, y fomentar la transparencia y el enfoque a largo plazo en la actividad financiera y económica.
Como indicó Valdis Dombrovskis, vicepresidente de la Comisión responsable de Estabilidad Financiera, Servicios Financieros y Unión de los Mercados de Capitales: “Para alcanzar las metas de Paris, Europa necesita una inversión adicional que va de los 175.000 a los 290.000 millones de euros anuales en las próximas décadas. Aún pretendiendo que en 2021 un cuarto del presupuesto de la UE contribuya a la lucha contra el cambio climático, la inversión pública no será suficiente. Es por ello que la UE ha propuesto medidas legislativas que incentiven la participación de capital privado en la promoción de proyectos verdes.”
La publicación de estas directrices como parte del Plan de Acción se debe a que el éxito de otras medidas en marcha depende de que las empresas divulguen adecuadamente su información sobre sostenibilidad. El sector financiero necesita información suficiente, fiable y comparable para la toma de decisiones de inversión de capital y evaluación de riesgos. Y, aún cuando la divulgación de información relacionada con el clima ha mejorado en los últimos tiempos, es urgente mejorar la cantidad, calidad y comparabilidad de la información divulgada para satisfacer las necesidades de los inversores y otras partes interesadas.
Entre las medidas del Plan de Acción para Financiar el Crecimiento Sostenible que se nutrirán de un buen “reporting” en sostenibilidad por parte de las empresas están las propuestas de Reglamento sobre el establecimiento de un marco (taxonomía) para facilitar las inversiones sostenibles; sobre la divulgación de información en materia de sostenibilidad por parte de los inversores institucionales y los gestores de activos; y sobre los índices de referencia relacionados con el impacto carbónicos.
Directrices sobre la información relacionada con el clima
La comunicación de la Comisión Europea recoge una serie de recomendaciones prácticas para mejorar el reporting sobre el impacto que las actividades de la compañía tienen sobre el clima, así como sobre los posibles riesgos que afronta por la incidencia que el cambio climático puede tener en su modelo de negocio.
Para ello, el documento pretende aunar las directrices generales sobre la presentación de informes no financieros publicadas por el ejecutivo comunitario en junio de 2017 con las recomendaciones del Grupo de Trabajo sobre Divulgación de Información Financiera relacionada con el Clima (TCFD), creado por el Consejo de Estabilidad Financiera del G20.
Este grupo publicó, también en 2017, una serie de recomendaciones para incitar a las entidades financieras y empresas a divulgar información sobre los riesgos y oportunidades relacionados con el clima. Sus indicaciones están ampliamente reconocidas como orientaciones de una fuente autorizada, y es por ello que la Comisión alienta a las empresas europeas a aplicarlas.
El documento final se basa asimismo en las recomendaciones formuladas por el Grupo de Expertos Técnicos sobre las Finanzas Sostenibles (TEG), instaurado por la Comisión en junio de 2018. También han sido tomadas en consideración las opiniones expresadas por las partes interesadas a partir del mismo.
Ventajas para las empresas informantes
Como la comunicación de la Comisión explicita, una mayor divulgación de información relacionada con el clima también puede acarrear consecuencias positivas para las propias organizaciones:
Una mayor toma de conciencia y comprensión de los riesgos y oportunidades relacionados con el clima dentro de la empresa, una mejor gestión de los riesgos y un proceso decisorio y de planificación estratégica más informado.
Una base de inversores más variada y un coste de capital potencialmente inferior, como resultado, por ejemplo, de la inclusión en carteras de inversión gestionadas activamente y en índices enfocados a la sostenibilidad, y de calificaciones crediticias más altas para la emisión de bonos y mejores evaluaciones de solvencia para los préstamos bancarios.
Un diálogo más constructivo con las partes interesadas, en particular los inversores y los accionistas.
Una mejor reputación de la empresa y el mantenimiento de la «licencia social para operar.
Se puede acceder al contenido íntegro de la comunicación a través del siguiente enlace.