Madrid, 18 de octubre de 2023.
Con motivo del octavo aniversario de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), el pasado 25 de septiembre, el Pacto Mundial de la ONU España ha lanzado la publicación “ODS Año 8. Rentabilidad económica y Agenda 2030: la sostenibilidad como sinónimo de negocio para las empresas”. El estudio analiza la implementación de los ODS y los Diez Principios del Pacto Mundial en todas las empresas admitidas a cotización oficial entre 2016 a 2021, además de abordar la relación entre la sostenibilidad y la rentabilidad.
Que la sostenibilidad no es un tema sectorial o tangencial al negocio, sino que debe formar parte de este, y que no va solo de gestionar riesgos, sino también de aprovechar las oportunidades de negocio, lo sabemos los dirses desde hace tiempo … otra cosa es que nos lo “compren” en el interior de las compañías.
Al compartir este informe del Pacto Mundial, “ODS Año 8. Rentabilidad económica y Agenda 2030: la sostenibilidad como sinónimo de negocio para las empresas”, lo que pretendemos es dar argumentos y datos a los directores de Sostenibilidad para ayudarles a que sus compañías avancen en este modelo de excelencia.
ESTUDIOS QUE AVALAN LA CORRELACIÓN ENTRE SOSTENIBILIDAD Y RENTABILIDAD ECONÓMICA
Según el estudio de Deloitte (2017) “2030 Purpose: Good business and a better future”, se calcula que las empresas que han asumido un fuerte compromiso con la sostenibilidad han logrado unos resultados superiores en un 11% a los de sus competidoras en el mercado de valores. Se indica que esta diferenciación se debe fundamentalmente a la capacidad de las empresas más sostenibles de involucrarse mejor con sus grupos de interés, especialmente plantilla, consumidores, socios/as, reguladores e inversores.
Los resultados de la investigación de George Serafiem (2020) publicados en la Harvard Business: “School Social-Impact Efforts That Create Real Value”, tras analizar el desempeño de más de 2.000 empresas de Estados Unidos durante 21 años, señalan que, aquellas empresas que mejoraron en criterios materiales ASG, superaron significativamente a sus competidores. El hecho de que solo se diera esta relación entre criterios materiales, y no en los no materiales, sugiere que los inversores son capaces de diferenciar aquellas acciones de sostenibilidad que ofrecen valor para la empresa, a prácticas que solo buscan una mejor imagen.
Brain & Company y EcoVadis (2023), tras evaluar el impacto de las actividades y los criterios ASG en 100.000 empresas, concluyeron en su estudio “Do ESG Efforts Create Value?” que las empresas que disponían criterios ASG se correlacionaban con un mejor desempeño financiero, considerando el crecimiento de ingresos y el beneficio bruto. Las medidas relacionadas con la sostenibilidad más correlacionadas con este desempeño financiero fueron la diversidad e inclusión, la satisfacción de la plantilla, el uso de energías renovables y la gestión responsable de proveedores.
DATOS DEL ESTUDIO QUE AVALAN LA CORRELACIÓN
El presente informe del Pacto Mundial (2023) llevado a cabo junto a la Universidad de Oviedo, recoge los resultados del análisis de las empresas del IBEX25 durante el periodo 2016-2021 y concluye respecto a la relación entre sostenibilidad y rentabilidad, en consonancia con los estudios anteriores que:
(A) La variable “desempeño en ODS” tiene un impacto positivo en la rentabilidad de la empresa. Es decir, en conjunto, el hecho de contribuir a los ODS tiene un efecto positivo en la rentabilidad de mercado de la empresa. Con respecto al cumplimiento de los Diez Principios, se observa que, salvo el indicador sobre desempeño en derechos humanos, un mayor compromiso con las normas laborales, con la protección del medioambiente y en la lucha contra la corrupción incrementa la rentabilidad de mercado de las empresas.
El hecho de que el ámbito de los derechos humanos no sea significativo con la rentabilidad de mercado puede responder a varios factores: es posible que el bajo desempeño de las empresas en este bloque (como se comprueba en el gráfico 11) pueda conllevar a que aún no tenga impacto en la rentabilidad de la empresa, además quizá sus efectos aparezcan en el medio-largo plazo siendo el periodo temporal de 6 años insuficiente para analizar su relación.
En cualquier caso, el análisis demuestra que la implementación de acciones y medidas de sostenibilidad en una empresa tiene en la mayoría de los casos una relación significativa con la rentabilidad de mercado, y que en ningún ámbito impacta negativamente en sus resultados financieros. Esto sugiere que aquellas compañías que adoptan prácticas empresariales socialmente responsables y sostenibles tienden a mejorar sus beneficios económicos además de contribuir positivamente al bienestar de la sociedad y el medioambiente.
(B) Además de este análisis por bloques, en el estudio se llevaron a cabo análisis individualizados de los 36 indicadores relacionados con el compromiso con los ODS y el cumplimiento de los Diez Principios. Los resultados que se presentan en la tabla 3, revelan que 15 de estos indicadores influyen positivamente en la rentabilidad de mercado. Entre ellos se encuentran algunos relacionados con el ámbito medioambiental, como la disposición de una política en este ámbito, la fijación de objetivos de reducción de emisiones o la evaluación de impactos con respecto al cambio climático. Esto sugiere que las empresas que adoptan estrategias de mitigación y adaptación al cambio climático pueden obtener una ventaja competitiva en los mercados financieros.
Además, se observó que algunas acciones estandarizadas de contribución a los ODS, como la mera identificación de ODS prioritarios, no mostraron una relación muy significativa con la rentabilidad de mercado. En cambio, medidas más ambiciosas como la medición de avances a los compromisos fijados están altamente vinculadas con el desempeño financiero de las empresas. El caso contrario ocurre con el bloque de lucha contra la corrupción, en el que las medidas más básicas como la disposición de un código ético y un canal de denuncias son las que más impactan en la rentabilidad de la empresa
Es importante señalar que, si bien estos resultados son alentadores, el análisis también revela que algunos indicadores no mostraron una relación positiva con la rentabilidad de mercado de la empresa. Esto pone de manifiesto la necesidad de seguir analizando la relación entre el desempeño en sostenibilidad y el rendimiento empresarial.
CINCO ACCIONES SOSTENIBLES CON UN IMPACTO POSITIVO EN LA CUENTA DE RESULTADOS
(1) FOMENTAR LA FINANCIACIÓN SOSTENIBLE
Las finanzas sostenibles están en auge, solo en España, los productos financieros que incluyen criterios ASG alcanzaron los 485.000 millones de euros en 2022, aumentando un 20% en los últimos 3 años. Aunque los estudios no concluyen que la inversión con criterios ASG sea más rentable que la tradicional, muchos de ellos sí subrayan su menor riesgo y mayor resiliencia ante cambios, lo que repercute en una mejor posición económica. Como resultado, los inversores y entidades financieras están implementando políticas de inversión que priorizan proyectos sostenibles, ofreciendo incentivos a las empresas para que se involucren en este tipo de financiación.
Oportunidades
- Muchas grandes empresas ya están respondiendo a estas demandas, financiando sus actividades con impacto ambiental y social a través de bonos verdes y sociales, préstamos sostenibles o líneas de crédito ligadas a indicadores de sostenibilidad. Este tipo de financiación es muy demandada por inversores y entidades financieras, y ofrece condiciones favorables con respecto a la tradicional, por lo que el coste de financiación para las empresas disminuye. Por ejemplo, muchas empresas que emiten bonos verdes se benefician del llamado “greenium”, una prima o beneficio financiero que las emisiones de bonos verdes pueden obtener en comparación con otros bonos convencionales o no sostenibles.
- Aunque aún de forma incipiente, poco a poco se están desarrollando productos de financiación sostenibles destinados específicamente a empresas de menor tamaño. Por ejemplo, la Unión Europea a través de su programa EU Next Generation lleva a cabo varios programas de financiación de proyectos de innovación, digitalización o descarbonización a pymes. A nivel nacional, entidades como el Instituto de Crédito Oficial ofertan programas específicos para financiar pymes que impulsen la sostenibilidad. Además, el sector bancario también está empujando en esta dirección, asesorando a empresas sobre la obtención de ayudas públicas relacionadas con la sostenibilidad, y desarrollando productos financieros con condiciones favorables para pymes sostenibles, un mercado en auge.
* En este sentido, os invitamos a consulta el Toolkit DIRSE sobre Financiación Sostenible (acceder)
Retos
- El desconocimiento de buena parte del tejido empresarial de estos productos de financiación sostenible es uno de los más relevantes. Según la consulta empresarial realizada por Pacto Mundial de la ONU España a más de 2.500 empresas españolas, solo un 20% dispone de instrumentos de financiación o inversión relacionados con la sostenibilidad.
- Otro de los grandes retos es la garantía de que estos productos ayuden verdaderamente a mejorar la vida de las personas y a lograr los Objetivos de la Agenda 2030. Es aquí donde la normativa y regulación está tomando un papel fundamental, impulsando un marco común en el ámbito de las finanzas sostenibles para evitar el llamado “greenwashing” o “social washing” (a través de la taxonomía ambiental europeo o el futuro reglamento sobre bonos verdes europeos, entre otros).
(2) MEJORAR LAS CONDICIONES LABORALES Y LA DIVERSIDAD DE LA PLANTILLA
La obtención de un empleo no conlleva necesariamente al acceso de condiciones laborales óptimas. Cada vez más empresas son conscientes de esta premisa y comienzan a percibir el valor añadido de proporcionar a la plantilla mejoras en el entorno laboral. Este valor puede suponer una mejora de la productividad de las personas empleadas, derivando en un aumento de los beneficios económicos para las empresas.
Oportunidades
- La mejora en las condiciones laborales ofrece a las empresas numerosas oportunidades. Según una investigación de la Cardiff Business School, el 93% de las empresas que contaban con la acreditación Living Wage Foundation presentaron algún tipo de beneficio, principalmente relacionado con la reputación, aunque muchas empresas también reportaron una mayor capacidad para contratar y retener a su plantilla, un menor absentismo y una mayor productividad. Esta acreditación reconoce a aquellas organizaciones que deciden establecer internamente un salario digno calculado en base a las necesidades diarias de la ciudadanía.
- Por otro lado, cada vez más inversores de todo el mundo están poniendo el foco en esta cuestión. Por ejemplo, el Índice Dow Jones de Sostenibilidad (DJSI) ha introducido recientemente nuevos requisitos relativos al salario digno38, lo que supone una necesidad emergente para las empresas, que deberán revisar el alcance de sus retribuciones.
- El impulso del salario digno no debe basarse únicamente en la gestión de la plantilla directa sino también en los/as trabajadores/as de la cadena de suministro. Numerosos estudios asocian las mejoras salariales con aspectos como una mayor productividad, estabilidad de la cadena de valor, gestión de riesgos más eficaz, entre otros.
- Otra variable que se ha ido introduciendo en los últimos años y que va más allá de la remuneración económica es el salario emocional. Este reúne distintos beneficios tales como la conciliación familiar, la flexibilidad horaria, las medidas de teletrabajo o el buen clima laboral, los cuales generan en la persona empleada un sentimiento de pertenencia, aumentando su implicación y compromiso hacia la empresa.
Retos
- En muchos casos a nivel interno existen estructuras de negocio rígidas donde la alta dirección no prioriza estas mejoras en su equipo, especialmente en empresas con alta rotación y mano de obra poco cualificada.
- Por otro lado, el entorno externo de la empresa está actualmente expuesto a numerosos cambios: crisis económicas, conflictos armados, aumentos de la inflación… lo que lleva a enfocar los esfuerzos a combatir estas contingencias y dejar a un lado las necesidades de la plantilla.
(3) LLEVAR A CABO UNA GESTIÓN RESPONSABLE DE LA CADENA DE SUMINISTRO
En la actualidad prácticamente todas las empresas del mundo disponen de una red de proveedores a través de la cual adquieren materias primas, subcontratan ciertos servicios, o incluso cubren todos los procesos de su organización. Aunque las acciones realizadas por una empresa pueden ser independientes de las llevadas a cabo por sus proveedores, las compañías son cada vez más conscientes de su responsabilidad en la gestión de la cadena de suministro.
Oportunidades
- Una gestión responsable fomenta una relación más estrecha con los proveedores, lo que permite reducir costes y anticipar riesgos. Además, puede mejorar la eficiencia y la calidad de los productos y servicios ofertados, incorporando materiales y procesos más sostenibles dentro de la cadena de valor. Por otro lado, supone una ventaja competitiva ya que mejora la reputación de la empresa y su capacidad para adaptarse a un entorno cada vez volátil.
- Todos estos beneficios se relacionan con mejoras económicas para la empresa. Según estudio de EY, una gestión responsable de proveedores puede aumentar entre un 12% y un 23% los ingresos de la cadena de valor. También, una encuesta contestada por más de 525 responsables de compras de todo el mundo concluía que un 20% de ellos habían experimentado mejoras económicas por una gestión más responsable, mientras que un 75% esperaba experimentarlas en los próximos 3 años4. Pero más allá del aumento de ingresos, la gestión de proveedores está especialmente relacionada con la reducción de costes. La misma encuesta revelaba que el 61% de los responsables de compras trabajan criterios de sostenibilidad con el objetivo de ahorrar costes. Además, según un informe de CDP, se calcula que, en caso de no gestionar los riesgos medioambientales derivados de las cadenas de suministro, las empresas pueden enfrentarse a costes de hasta 120 billones de dólares en los próximos cinco años.
- Una de las mayores tendencias para mejorar el control y la eficiencia de los procesos dentro de la cadena de suministro es la tecnología. El uso creciente de la inteligencia artificial, así como de otras herramientas digitales de última generación como el blockchain permiten una mayor trazabilidad de la cadena de valor. En algunos casos esta trazabilidad puede reducir los costes en hasta un 20%
Retos
- La falta de recursos puede ser una barrera al no contar con la capacidad suficiente para invertir tiempo y dinero en estos aspectos.
- Por otro lado, según una consulta empresarial del Pacto Mundial de la ONU España a las empresas españolas, solo el 8% de los proveedores de estas empresas están formados en sostenibilidad.
- Además, el limitado acceso a información relativa a proveedores (especialmente si se encuentran en otros países) conlleva una falta de claridad sobre las áreas de actuación.
- Por último, muchas empresas aún no han integrado dentro de su gestión mecanismos específicos en este ámbito, según esta consulta de Pacto Mundial de la ONU España solo el 21% de las empresas españolas evalúan a sus proveedores en derechos humanos, y un 31% en aspectos medioambientales. La actual tendencia regulatoria con normativas que inciden en esta gestión, como la de las empresas futura directiva europea sobre diligencia debida o la directiva europea de presentación de información sobre sostenibilidad, sin duda, mejorará estos resultados.
(4) ACCEDER A NUEVOS MODELOS DE NEGOCIO SOSTENIBLES
Para que las empresas puedan contribuir a lograr los grandes retos de la humanidad es necesario impulsar modelos de negocio más sostenibles desde un punto de vista social y medioambiental.
En los últimos años están surgiendo numerosas normativas que impulsan los nuevos modelos de negocio sostenibles. Por ejemplo, el Real Decreto 1055/2022 de envases y residuos de envases fomenta la incorporación de acciones de economía circular dentro de la empresa, la Ley 7/2021 de cambio climático y transición energética busca el desarrollo de modelos de negocio bajos en carbono, y Real Decreto 636/2022 por el que se regula el sello de inclusión social promueve los negocios inclusivos dirigidos a personas con pocos recursos.
Oportunidades
- En el sector de la alimentación, los modelos de negocio basados en productos ecológicos están en auge, en 2021 el valor de mercado en España de estos productos fue de 2.752 millones de euros, y se prevé que aumente en 2030 hasta los 5.122 millones, casi duplicando su valor.
- En la industria turística, los viajes sostenibles son cada vez más demandados por los clientes, según un estudio realizado a 29.000 viajeros/as, el 79% de estos afirmaba utilizar modos de transporte respetuosos con el medioambiente, y el 84% tenía en mente la preservación del patrimonio cultural durante sus viajes.
- También los sectores de la tecnología y de la construcción se pueden beneficiar de uno de los modelos de negocio con más perspectivas de crecimiento en los próximos años, las ciudades inteligentes.
- La inversión en este mercado puede llegar a 189 mil millones de dólares a nivel mundial en 2023. A estos modelos se unen otros como la movilidad sostenible en el sector del transporte, las prendas de ropa provenientes de materiales reciclados en la industria textil, o las tecnologías contra el sedentarismo entre las empresas de deporte y ocio.
Retos
- La dificultad en la identificación de nuevos productos o servicios sostenibles. Esto puede estar ligado a la escasez de recursos en relación con las potenciales inversiones necesarias para impulsarlos.
- Por otro lado, dado que no existen modelos lo suficientemente consolidados que cuenten con evidencias acerca de la evolución que puedan tener, muchas empresas se encuentran frente a una gran incertidumbre sobre sus expectativas y las competencias y características requeridas. Todo ello se suma a la constante actualización de las regulaciones en materia de sostenibilidad.
- Por último, otro reto relevante es hacer frente a las posibles repercusiones negativas del impulso de estos modelos. Efectos colaterales como una creciente demanda de la energía debido a la necesidad de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, o un aumento de la competencia por la tierra y su consecuente pérdida de la biodiversidad, debido a la alta producción de biocombustibles, son escenarios que deben tenerse en consideración. La anticipación a este tipo de riesgos es indispensable para evitar posibles consecuencias negativas.
(5) INNOVAR EN PROCESOS Y MATERIALES MÁS SOSTENIBLES
La innovación es una palanca esencial en el desarrollo de la humanidad. Este ámbito siempre ha estado presente en épocas de cambio y ha demostrado ser una fuerza impulsora del progreso y la transformación. Para el sector empresarial, en momentos como el actual la capacidad de adaptarse y encontrar soluciones innovadoras se vuelve aún más crítica y debe hacerse desde una aproximación holística.
Oportunidades
- Una forma de innovación empresarial que está ganando peso en los últimos años es la llamada eco-innovación. Esta engloba el desarrollo de nuevos productos, servicios, procesos y modelos empresariales que contribuyan a la sostenibilidad medioambiental y a la eficiencia de los recursos. Abarca desde las energías renovables a la economía circular, pasando por la gestión ecológica de la cadena de suministro o el diseño de productos sostenibles. La eco-innovación puede impactar de forma positiva en la cuenta de resultados de la empresa y en los mercados. Por ejemplo, innovando en medidas de economía circular el PIB europeo podría aumentar hasta un 11% para 2030 y un 27% para 2050. También el negocio de las energías renovables está creciendo enormemente, se prevé que en 2030 el 65% de la electricidad provenga de estas fuentes.
- La llamada innovación abierta es otra tendencia al alza en los últimos años. Se basa en buscar y aprovechar ideas, conocimientos, tecnologías y recursos tanto internos (provenientes de la plantilla o la alta dirección) como externos (proveedores, universidades, start-ups, otras empresas, etc.) para impulsar la innovación. Se calcula que las empresas que adoptan este tipo de innovación pueden alcanzar una tasa de crecimiento de sus ingresos de hasta un 59% mayor que las que no lo hacen56. Tal es así que según un estudio a más de 1.000 empresas multinacionales de todo el mundo, el 71% de ellas afirmaba que tienen previsto aumentar su inversión en prácticas de innovación abierta en los próximos dos años. El mismo estudio concluye que el 83% ven la innovación abierta como un factor clave para abordar los objetivos de sostenibilidad, por lo que su vinculación con el desarrollo sostenible es indiscutible.
Retos
- Muchas tecnologías innovadoras están aún en constante evolución, por lo que la decisión de invertir en estas soluciones implica adaptarse y mantenerse continuamente actualizado, algo que no todas las empresas pueden permitirse.
- Además, pese a los grandes avances y posibilidades, todavía existen dudas acerca de su escalabilidad, por lo que en muchas ocasiones las innovaciones se basan en acciones puntuales, en lugar de en verdaderos cambios disruptivos.
- Asimismo, en algunos casos otro gran reto supone superar las estructuras rígidas y la resistencia al cambio entre las empresas. Una cultura corporativa abierta a nuevas ideas y basada en la colaboración, la creatividad y el intercambio de ideas será crucial para adentrarse en estos mercados, y beneficiarse de sus oportunidades. Esto implicará fomentar un entorno donde el personal de la empresa se sienta empoderado para proponer nuevas soluciones, independientemente de su cargo en la organización. Como resultado de estos y otros desafíos, no todas las empresas están implementando medidas en este ámbito, según una consulta de Pacto Mundial de la ONU España, el 51% de las empresas españolas no llevan a cabo innovaciones relacionadas con el desarrollo sostenible (entre las grandes empresas el porcentaje se reduce al 33%).
Para mayor detalle, consulta el estudio del Pacto Mundial (2023): ODS Año 8. Rentabilidad económica y Agenda 2030: la sostenibilidad como sinónimo de negocio para las empresas.